El múltiple campeón del WRC Sébastien Ogier probó por primera vez el Toyota GR010 Hybrid durante el rookie test que el Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC) organizó en el circuito de Shakhir, en Bahréin.
Después de conducir en Italia a mitad de semana con el Toyota Yaris WRC para prepararse para el Rally de Monza (último capítulo del Mundial de Rally en el que buscará su octava corona), Sébastien Ogier estuvo en Bahréin el pasado fin de semana para descubrir un poco más el Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC). El francés dio el primer paso hacia su próximo objetivo, ya que participó en el “Rookie test” (una prueba de debutantes que en realidad no fue tan así porque contó con muchos pilotos veteranos) que la categoría organizó en el circuito de Shakhir, en Bahréin.
Allí el heptacampeón del mundo de rallys completó un total de 84 vueltas al volante del ‘hypercar’ GR010 Hybrid de Toyota, el prototipo referencia del WEC. Una experiencia totalmente diferente para el piloto galo, ya que aunque el coche de Le Mans cuenta también con tracción a las cuatro ruedas como su Yaris WRC, su comportamiento es totalmente diferente, con mucho más ‘downforce’ y una potencia de 700 caballos en su motor híbrido.
Estableció su mejor marca en 1'50''647 por la mañana, a dos segundos del mejor crono que obtuvo Nicolas Lapierre (Alpine) en 1'48''697. “Ha sido realmente emocionante pilotar el Toyota y he disfrutado todo el tiempo que he pasado en el coche. No quise ponerme presión en el tema del crono porque antes tenía que aprender muchas cosas que eran nuevas para mí: la velocidad de paso por curva, la capacidad de frenado, cómo manejar el sistema híbrido, cómo afrontar las trazadas”, explicó Ogier, quien tuvo a Sébastian Buemi como coach.
El piloto francés quería hacer este test y piensa, sin abandonar por completo el Mundial de Rally (donde en 2022 disputará algunos eventos, compartiendo el tercer Rally1 con Esapekka Lappi), en un futuro en el Mundial de Resistencia y en triunfar en las 24 Horas de Le Mans. Aún no se ha tomado ninguna decisión definitiva sobre si correrá el año próximo en Le Mans como es su anhelo. Al parecer analizan dos opciones: ingresar directamente a la formación oficial desde el año próximo o hacer una temporada de adaptación en un equipo de las categorías inferiores para dar el salto al máximo nivel en 2023.
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